Hoy
hablaré del cliente con patrón pasional. Este es una persona
excesivamente emotiva que ama la buena mesa y el buen servicio. Analiza y
aprueba inconscientemente desde el recibimiento que le ofrecen a él y a sus
acompañantes en la puerta del
restaurante hasta la disposición y pulcritud
de los elementos en mesa, el ambiente agradable y tranquilo del local y la
amabilidad del sommelier y el dependiente que lo atiende.
Otra
de las características propias del cliente pasional es que aprecia la precisión
ante las preguntas que hace. Le gusta saber exactamente sobre las preparaciones
de platos escogidos, incluso cantidad y en
cuanto a vino pregunta por las variedades de uvas que están presentes en los
vinos de corte, la calidad de las añadas de una región específica y su posible
maridaje con el plato seleccionado.
Degusta
la comida y el vino con mucha satisfacción. Hace comentarios sobre el aporte de
los ingredientes al gusto general de los platos y cuando termina manda a
felicitar al chef de cocina si los resultados son los esperados por él. Si el
vino fue sugerido acertadamente por el sommelier, elogia el papel de este y lo
clasifica respetuosamente como un profesional inteligente y digno.
Los
profesionales con experiencia en la restauración suelen ganarse su simpatía.
Para esto, el papel del sommelier debe ser decidido y sincero. Debe conocerse
al dedillo todo lo referido a los vinos en la Carta así como los platos que
conforman el Menú del restaurante en cuestión. Debe estar atento a mantener la
copa de vino con la cantidad apropiada de líquido durante toda la cena,
procurando mantener la temperatura ideal.
Generalmente
estos clientes piden la oxigenación y/o decantación de los vinos y concentran
su atención en este servicio. Escogen vinos clásicos y no se arriesgan con
nuevas marcas que aun no se conocen con amplitud.
Gustan
de una copa de vino dulce para el postre y, después del café, destilado y
habano son parte esencial de la sobremesa. El sommelier no debe dudar en hacer
un servicio impecable de encendido del puro y de aconsejar la mejor bebida para
este.
A
pesar de la extremada atención que requiere este cliente, nos deleitamos con
sus refinamientos. Nos obliga a perfilar nuestro servicio, a cuidar la etiqueta
que caracteriza al verdadero profesional. Por mi parte, con este tipo de
cliente me siento más cómodo.
Este
es otro patrón. Existe una veintena más según mi modesta clasificación. La Gran
Enciclopedia de Tipos de Clientes de Vinos continúa escribiéndose. ¿No se
ha visto reflejado aun? Tal vez sea caracterizado la próxima vez. No falte, por
favor.
Hoy usted podrá escuchar a René García por Radio Taino,de La Habana, cuba, a las 7 de la noche.. por internet nos puede contactar por www.radiotaino.cu
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